Zabalo es una comunidad de nacionalidad Cofán, que convive con la riqueza de la Amazonía ecuatoriana descendiendo por el río Aguarico dentro de la Reserva de producción de fauna Cuyabeno, en la que se asentaron hace ya varios años.
Cuando tuvimos la oportunidad de poder llegar hasta este lejano punto del Ecuador no lo pensamos dos veces para realizar esta aventura, es por eso que trazábamos la ruta desde Quito.
Antes que salgan los primeros rayos del sol nosotros ya estábamos en camino vía terrestre hacia Lago Agrio como punto de referencia.
Tras aproximadamente 6 horas de viaje la calurosa y fronteriza ciudad nos acogía cerca del medio día. Ahora nuestro siguiente punto sería Tarapoa una pequeña población que nos tomaría llegar casi 2 horas, es muy notable ver como la economía se mueve en torno a la explotación petrolera de la zona, para embarcarnos en el bote y llegar a nuestro destino tendríamos que llegar hacia el puerto Las Mercedes un recinto a orillas del gran Aguarico, aquí el río es el principal medio de transporte, es por eso que las gabarras, lanchas y botes toman protagonismo en la vida de las comunidades asentadas a lo largo del Río.
Recinto Las Mercedes – 360°
Era hora de partir y el sol empezaba a ocultarse, Felipe motorista y anfitrión con su familia nos daba la bienvenida y arrancaba los motores, en su lancha viajábamos acompañados de víveres y combustible. El viento refrescaba la calurosa tarde, a lo largo del viaje comunidades Shuar se dejaban ver en su diario vivir, unos pescaban, otros lavaban sus prendas de vestir y otros transportaban chonta, plátano, madera o agua.
Llegaba la noche, nosotros temerosos sentados en el bote ansiábamos llegar pronto, en medio de la oscuridad las aguas del Aguarico se iluminaban marcando parcialmente el camino, el mismo que debería ser ayudado con linternas para poder esquivar los troncos y raíces de los árboles que descienden por las mismas aguas.
El sonido del motor se fundía con los de la fauna del Cuyabeno, tras 4 horas de descenso llegábamos a oscuras a Zabalo la comunidad Cofán.
Al siguiente día la familia Borman Yumbo nos esperaba con el desayuno y al fin podíamos ver lo impresionante que es la selva amazónica. Grandes árboles y palmeras se entre unen para tejer esa frondosa capa verde que se pierde en el horizonte, aquí los afluentes alimentan la fauna, flora y marcan el camino hasta el Amazonas más abajo en Brasil.
Es muy común ver surcar a los guacamayos con su sonido bullicioso de un lado del Río al otro, así también se podían ver pequeños y coloridos loros imperceptibles al lente de mi cámara.
El almuerzo llegó y era hora de deleitar un plato típico de la comunidad, Paiche (pez del lugar) ahumado, Chonta cocinada y Canungucho o Aguaje (Fruta exótica del Amazonas), no podía faltar para refrescar una toronja con azúcar.
Al siguiente día el río Zabalo nos esperaba para navegarlo, este se encuentra 20 minutos río abajo del Aguarico, empezábamos a navegarlo por tu estrecho canal en el que con buenas maniobras del conductor de la lancha esquivábamos raíces y troncos de los árboles que con la creciente del Río son arrastrados, aquí aves muy rápidas levantan vuelo al sonido del motor, al igual que las charapas (tortugas de río).
Río Zabalo – 360°
Después de navegar río arriba por casi 2 horas probábamos suerte con nuestros anzuelos, pero solo conseguimos un par de pirañas. La lluvia del día anterior había provocado que el río crezca y las aguas turbias no son buenas amigas de los pescadores.
Nuestra visita concluía, pero nos llevamos una gran experiencia, conocimiento y mucha conciencia. La madre selva en pocos años no soportará más, hemos hecho tanto daño. Esto es un llamado a cuidar nuestro planeta, a cuidar el agua. Ese gran pulmón que tenemos y ha soportado todo hasta ahora está lastimado.
Ocaso en el Aguarico – 360°
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Turismo Comunitario Cofán Zabalo
100% Recomentado.
Cabañas confortables y listas para recibir a más aventureros, te dejamos unas postales del lugar.
